Hablar de Manuel Cosano Logroño (conocido como El Ruiseñor del Pelícano) en la Semana Santa de Puente Genil significa mencionar a uno de nuestros más preclaros saeteros, protagonista de una manera muy personal de interpretar la saeta cuartelera, apreciada y glosada efusivamente por todos los que tuvieron la ocasión de escucharlo. Manolo nació en un lejano 1925 en el popular barrio de Miragenil, yéndose al poco tiempo a vivir al campo entrando en contacto con los cantes de los gañanes. Sus primeras saetas cuarteleras las escuchó de mozalbete después de la Guerra Civil durante los, por entonces, Domingos de Romanos en las voces de los hermanos de Los Apóstoles. Se hizo Pelícano en la década de los 70 del pasado siglo, falleciendo en el año 2012.
Aquí lo vamos a escuchar en una saeta por carcelera con una preciosa letra de Francisco Muñoz Cruces, que representa una de las señas de identidad del Grupo de El Viejo Pelícano que este año está celebrando su centenario y los cincuenta años de su refundación.
“Ave que muere sangrada,
Por sus hijos con amor,
Figura excelsa que encarna
La Imagen del Redentor;
Sangre que Cristo derrama
Redimiendo al pecador”.